Hola Pastitas, debido a
ciertas casualidades de la vida (mi trabajo para: Español escrito para fines
académicos a través de textos literarios), he tenido el gran placer de que Iria
G. Parente y Selene M. Pascual, autoras de Cuentos
de la Luna Llena. Alianzas, me concedieran esta increíble entrevista. Si
sois seguidores del libro aquí os dejo más datos sobre tan increíble obra y sus
autoras. Y si no lo sois, ¿a qué estáis esperando? Entrad a ver nuestra reseña y... ¡devoradlo!
—Tenéis un blog en el que
publicáis la novela Pétalos de Papel
pero, ¿Cómo vino a vosotras la idea de Cuentos
de la Luna Llena? Habladnos de esta fascinante historia.
Selene: Me temo que
la anécdota de cómo surgió la idea es bastante tonta. Está relacionada
directamente con otra novela que un día empecé, y en la que una chica se
escapaba antes de su boda y dejaba a su prometido plantado. Así que dije: pues
ahora quiero una historia en la que haya una boda de verdad. Nunca pensé que
daría para tanto, la verdad.
Iria: Como siempre
decimos, Selene y yo nos conocemos desde hace muchísimos años, lo que nos ha
permitido tener la complicidad suficiente como para poder escribir juntas. Yo
viví hace ya muchos años aquella primera idea que tuvo y que se quedó en unas pocas
páginas y la insté a continuar, pero la novela no avanzó más allá del prólogo.
Años más tarde de eso, escribimos Pétalos
de papel de manera conjunta, y nos gustó la experiencia y quisimos repetir,
así que entre otro sinfín de historias que teníamos ambas recordamos esta y nos
pusimos a ello, incluso sin un guion fijo más allá de unas ideas muy claras de
detonantes argumentales (por ejemplo, la boda, como comenta Selene). Lo cierto
es que no recuerdo muy bien cómo llegamos a la conclusión de embarcarnos en
esta historia y no otra, pero una vez nos decidimos por entrar en este mundo
fue algo tan natural como empezar a dividirnos los personajes que narrarían la
novela y comenzar a escribir.
—¿Qué sentisteis cuando la publicasteis? ¿Y cada vez que la
veis en las librerías?
Iria: La verdad es
que cuando enviamos la novela a distintas editoriales no esperábamos nada de lo
que ha venido. Para empezar, no esperábamos que las editoriales interesadas nos
respondieran tan rápido (todas a las que tocamos nos dieron contestación en
menos de tres meses, cuando lo normal en el mundo editorial es, si tienes
suerte, seis) y, para seguir, no esperábamos que hubiera tanta gente que
quisiera sacar adelante nuestro proyecto. No esperábamos la buena acogida por
parte de distintos editores, así que esa fue la primera sorpresa. La siguiente
fue cuando nos decidimos a sacarla con Everest: cuando tuvimos nuestra primera
reunión con la gente de la editorial nos quedamos sobrecogidas por el cariño
con el que hablaban de la novela y toda la expectación e ilusión que tenían por
sacarla al mercado. La editorial desde el primer momento se ha mostrado muy
implicada con la novela, y eso te llena de ganas porque sabes que van a tratar
tu trabajo con cariño y esforzándose por hacer las cosas bien. Y después ya
vino todo el proceso de verdad: el de publicación, el de tener el libro en las
manos y el de verlo en manos de otros. Eso fue incluso más de lo que yo siempre
había imaginado. Cuando pude abrazar (sí, abrazar) el libro por primera vez tuve
ganas de llorar y saltar y gritar por ahí como una loca. Bueno, de hecho, lo
hice.
Selene: Han podido
pasar meses, pero yo sigo sin asimilarlo. Desde que Iria me llamó para decirme
que nos la publicaban, es como si todo le pasara a otra persona. A veces paso
por delante de un escaparate en el que están y pienso: “¡Eh! ¡Tienen Alianzas!” y entonces empiezo a ponerme
roja como un tomate.
—¿Tenéis alguna firma de libros preparada para este año?
Iria: Las firmas para
este 2015 todavía no están planificadas o por el momento no se nos ha pasado un
horario al respecto, aunque es seguro que estaremos en distintas Ferias del
Libro y cuando salga Encuentros, la
segunda parte de la trilogía, volveremos a hacer una pequeña gira por algunas
ciudades.
—¿Qué opináis de la portada? ¿Y de todos los Fan Art que os
envían los lectores?
Selene: A mí la
portada al principio no me convencía. Siempre es difícil ver por primera vez a
los personajes, que hasta entonces solo habían estado dentro de tu mente,
plasmados por la imaginación de otra persona. Pero cuando la vi ya impresa, en
un ejemplar, fue diferente. Me gustó mucho más de lo que había creído. Los fanarts es simplemente imposible no
amarlos: al fin y al cabo, están hechos con todo el cariño y dedicación. Aunque
a veces me asombra ver lo diferentes que son a lo que yo tengo en mente cuando
escribo.
Iria: Como a Selene,
a mí la portada en un principio me parecía muy lejana a lo que yo en un
principio había creído que sería. De hecho, hay una anécdota al respecto, y es
que en esa primera reunión que antes mencionaba, con la editorial, cuando nos
preguntaron sobre cómo veíamos la portada, yo puse dos condicionantes: no
quería ni que fuese un personaje de frente y que si pudiera ser el método de
ilustración utilizado para el diseño no fuese la fotomanipulación. Exactamente
lo que terminó siendo la portada. Aún así, es cierto que luego la portada ha
gustado mucho y funciona muy bien a nivel comercial, y con el tiempo nos
acostumbramos y no nos disgusta (aunque esa, para mí, no será Fay en mi vida).
—¿Cómo surgieron toda esa variedad de personajes? ¿Teníais
claro su futuro en la historia desde el principio? ¿De dónde vienen los
nombres?
Selene: Los
personajes surgieron poco a poco, a lo largo de los años. La historia original
(que no llegaba a las 10 páginas, porque quedó abandonada) presentaba a siete
personajes de los que salen en Alianzas.
Como pasa siempre, algunos otros se eliminaron y, definitivamente, se añadieron
muchos, muchos más. Y no, su destino no iba a ir por donde fue, en un primer
momento…
Iria: Respecto a los
nombres, cada uno tiene su propia historia detrás. Por ejemplo, Eirene es un
nombre que viene del griego y significa «paz», algo bastante irónico teniendo
en cuenta el carácter de este personaje; o Mab, que está cogido directamente
del nombre de la Reina de las Hadas según el folclore inglés (Queen Mab);
Shakespeare mismo ha utilizado ese nombre para referirse a la reina feérica en
Romeo y Julieta, por ejemplo.
—¿Qué tal vais con la segunda parte?
Selene: ¡Viento en
popa, ya en proceso de corrección!
Iria: Y queremos
cortarnos las venas. Ups, esto no se dice en una entrevista seria de autoras
respetables, ¿no? Bueno. Es la verdad. Hemos tenido que escribirla en un tiempo
récord de menos de tres meses por exigencia de la editorial y, aunque es cierto
que lo hemos disfrutado mucho, la verdad es que ha sido un trabajo muy, muy
agotador: Encuentros tiene mayor
dimensión que Alianzas, además de
bastante más complejidad argumental y un mayor número de tramas a desarrollar,
de modo que ha sido un proceso duro aunque satisfactorio.
—¿Qué os están pareciendo las críticas hasta el momento? ¿Hay
alguna que recordéis especialmente?
Iria: Yo leo siempre
todas las críticas que se hacen y estoy muy implicada en las impresiones
también que se vuelcan por redes sociales. Y la verdad, no podría estar más
feliz al respecto: la impresión general es mucho más que positiva y, como pasó
con las editoriales, no esperábamos tal aceptación por parte de los lectores.
No es solo que la novela guste, sino que muchos de los que la leen y la
disfrutan además se implican con ella. No solo mediante fanarts, que son el
ejemplo más gráfico y evidente, sino también con comentarios y seguimiento
continuado, con extrapolación de la historia y personajes a su vida diaria…
¡Eso es increíble! Ver que lo que tú has creado de verdad puede significar algo para otra persona es
mágico.
Respecto a lo que más recuerdo, y creo que Selene estará de
acuerdo conmigo, no es una crítica exactamente, pero va por ahí: la mejor
experiencia que hemos tenido con respecto al feedback de lectores ha sido sin
duda el Club de Lectura de La Madriguera Literaria en Valencia. Un montón de
gente, más de veinte personas, que se habían leído la novela y la comentaban,
la vivían, debatían sobre ella, le sacaban matices, compartían puntos de vista.
En el Club vivían la novela. Fue
genial conocer a tantos lectores y poder hablar con ellos con tranquilidad (el
Club duró más de tres horas y media), porque normalmente es algo que echo de
menos hacer. Por redes sociales es complicado por los spoilers, y en eventos
como firmas o presentaciones el tiempo es muy, muy limitado y el encuentro con
el lector dura menos de un minuto porque enseguida tiene que venir el siguiente
a darte su libro y firmártelo. Me gustaría hablar muchísimo más con las
personas que se toman el tiempo y la dedicación de leerse nuestra novela: para
mí es algo muy enriquecedor.
—¿Os ha cambiado la vida desde la publicación de Cuentos de la Luna Llena?
Selene: La mía solo
ha cambiado si cuenta el hecho de que es un sinvivir saber que tienes una fecha
de entrega y un montón de gente con unas expectativas muy altas…
Iria: En mi caso lo
mismo, aunque lo que peor llevo son las expectativas. Durante el proceso de
creación no pensamos en lo que hay más allá (futuros escritores: nunca penséis
en el público mientras escribís o tendréis dilemas existenciales y páginas en
blanco para parar un tren), pero cuando la novela ya está escrita y entras en
procesos como la revisión o hay gente preguntándote a todas horas cuándo sale
la continuación, inevitablemente piensas que tienes una responsabilidad muy
grande sobre tus hombros: darle a los lectores algo que merezcan, algo que sea
digno de ellos, algo que no les decepcionen. Sobre todo si tenemos en cuenta la
buena acogida de Alianzas.
—¿Os gustaría añadir algo más a la entrevista?
Selene: ¡Solo que ha
sido un placer contestarla!
Iria: Profesora de
Español de Carla: ¡póngale un diez a esta chica! ;) Y a ti, Carla, muchas
gracias por interesarte tanto por la novela, por ser una de esas lectoras que
se implica, y por hacernos esta entrevista.